Ya están de vuelta nuestras
Acciones Urbanas Absurdas en su tercer capítulo. Hemos regresado a la calle, aunque en realidad podemos afirmar que nunca volvimos a casa.
En esta ocasión hay algo molesto que ocurre en la ciudad que no se nos podía escapar en estas fechas pre-navideñas:
El consumo masivo. Desde hace semanas ya nos han marcado las navidades con las luces callejeras y estamos obligados a comenzar a comprar regalos aunque no queramos.
Si lo extrapolamos a la televisión, seguro que todos recordamos esos
anuncios de juguetes y productos para niños que emiten por las mañanas entre los dibujos animados. Por supuesto, el producto en sí no nos interesa, pero sí esa letra pequeña que adorna el final de cada anuncio en forma de mensajes que nos ayudan a comprender mejor la
publicidad engañosa, que viene a decir que
nos mienten pero no nos mienten, que nos
engañan pero de buenas, y que, en definitiva,
hay que salir a comprarlo ya.
Cuando los Clicks de Playmobil aparecen surcando el más temerario de los mares entre la niebla y el oleajenos advertirán que es
FICCIÓN PUBLICITARIA. Si el barco en cuestión funciona con baterías (aunque ojito, nos las encontraremos en la caja) leeremos
PILAS NO INCLUÍDAS. Asimismo, es posible que el juguetito cueste
MÁS DE 30 EUROS aunque
SOLO INCLUYE DOS UNIDADES que por supuesto
SE VENDEN POR SEPARADO, no vayamos a pensar que cuando los niños abran el paquete el día de reyes salga un barco a toda vela lleno de clicks piratas que además andan solos y sufren una terrible tormenta.
Como veis en las fotos, esos mensajes están ahora en la calle, para que sepas de que va el juego.
(Gracias a Resurco por su ayuda)