jueves, 28 de abril de 2022

Construyendo resistencias en el barrio Carlos Botelho (Lisboa)

Semana de intensa lucha por la vivienda en Lisboa (la ciudad de las 48.000 casas vacías), trabajando con el colectivos Stop Despejos y la asociación Habita en este nuevo caso de injusticia social en forma de desahucio masivo.

Los días 19 y 20 de abril, el Ayuntamiento de Lisboa, a través de la empresa publico-privada Gebalis, promovió el desalojo ilegal y mediante violencia policial (más de 150 antidisturbios) de cinco familias residentes en el barrio Carlos Botelho (Olaias, Lisboa), sin cualquier diálogo, alternativas o apoyo social, y sin dar el tiempo para defenderse legalmente o para informar sobre la situación económica y social en que se encuentran.

El aviso de desalojo fue colocado en las puertas de dichxs vecinxs el 18 de Abril. Menos de 24 horas después, las familias fueron desalojadas por la policía. 19 personas, 10 de las cuales son menores (con edades entre 0 y 12 años) fueron obligadas a dejar las viviendas durante la noche. No hubo acompañamiento social, ni siquiera respeto por el ya de por sí breve plazo de tres días para desalojar estas viviendas sociales que ocupaban por falta de alternativas y falta de ingresos. La solución propuesta por el Ayuntamiento fue invitarles a llamar a la línea de emergencia social 144 que no ofrece ninguna alternativa de vivienda adecuada y, por lo tanto, las familias están sin hogar y en situación extremadamente precaria.

Seguimos en lucha y continuaremos a exigir una solución para lxs vecinxs de Carlos Botelho!

Más info en este enlace.



miércoles, 13 de abril de 2022

Más proyecciones a la vista en Casa da Achada (Lisboa)

"Sem casas não há ruas (Sin casas no hay calles)" es el nuevo ciclo de cine que la Casa da Achada de Lisboa tiene previsto para el próximo lunes 18 de abril a las 21:30h.

Además de "Casas para o povo" de Catarina Alves Costa (2010, 17') y "C.R.E.A" de João Garrinhas e Susana Costa (2013, 18') se proyectará nuestro "RUA" (2021), un registro documental que comenzó antes de la Covid-19, una mirada interseccional a las protestas que ocupan las calles de Lisboa, desde un espacio subjetivo de militancia política. 

Ao mesmo tempo que começam os ensaios da «Kantata do Tecto Incerto», uma criação colectiva de um espectáculo sobre os problemas da habitação, propomos um ciclo de cinema em que a questão do «habitar» é central, incluindo, ao lado de alguns «clássicos», filmes sobre a gentrificação das cidades, os despejos ou as lutas pela habitação em Portugal e no mundo, do 25 de Abril à actualidade. Mas também sobre modos vários de viver e habitar os lugares. Porque as casas e os lugares são de quem os habita e de quem os faz. O título do ciclo parafraseia um verso de um poema de Ruy Belo, que começa assim: «Oh as casas as casas as casas...».


viernes, 1 de abril de 2022

Ololiuqui: el LSD antes del LSD

Nos relata Wade Davis en esa biblia titulada "El río, exploraciones y descubrimientos en la selva amazónica" (descargable en este enlace) que a finales de la década de los años 30 el etnobotánico Richard Evans Schultes pasó diferentes temporadas en las tierras altas de Oaxaca (México), investigando y recogiendo muestras de plantas (conocidos son sus estudios sobre el hongo psilocibio Teonanácatl). Una de esas plantas fue la apodada enredadera de la serpiente, el Ololiuqui, rebautizado por la ciencia hegemónica como Turbina Corymbosa. Sus semillas fueron utilizadas desde tiempos inmemoriales para diagnosticar enfermedades, ritos visionarios y de adivinación por los Mexicas de la zona y Schultes la persiguió con intensidad a partir del momento en que escuchó aquel dicho indígena de "He creído en los sueños, en las hierbas mágicas, en el peyote, en el ololiuqui, y en la lechuza."

En 1629, en plena conquista y genocidio español, el sacerdote y Ministro de Indios Hernando Ruiz de Alarcón escribía: "Es hecho notable la mucha fe que ponen los nativos en esta semilla... la consultan como a un oráculo para saber... cosas que no están al alcance de la mente humana... es tal su veneración por el ololiuqui qué hacen cuánto hay en su poder para que la planta no llamé la atención de las autoridades eclesiásticas".

En 1939 Schultes se convirtió en pionero occidental clasificando la planta entre las alucinógenas ya que unos años después, en 1943, un tal Albert Hofmann sintetizaba en Suiza la dietilamida de ácido lisérgico (es decir, el LSD) y resultó que el Ololiuqui sólo se diferenciaba del famoso ácido alucinógeno por el cambio de dos átomos de hidrógeno por dos grupos de etilos. Ya en la década de los 50 el banquero (!) y etnomicólogo Gordon Wasson publicó en la revista Life el artículo "Seeking the Magic Mushroom (Buscando el hongo mágico)" sobre sus experimentos psicoactivos en México con Schultes como referencia, punto de partida de la etapa Psicodelia de los 60 con un tal Timothy Leary a la cabeza... pero esto ya es otra historia.